El bienestar animal es algo que se encuentra muy en boga en la actualidad, nuestro estilo de vida y la forma en la que nos relacionamos con nuestras mascotas han evidenciado la necesidad de tener presente este tema.
Queremos contarles que el bienestar animal es un tema que data de mucho tiempo, esta basado en las llamadas 5 libertades y inicialmente se diseño y pensó para animales de producción.
Vamos a hacer hincapié en la libertad número 5, ya que las demás se entienden por si mismas, esta libertad es muy importante explicarla y entenderla, sobre todo en tiempos donde nuestro perro es un miembro más de la familia.
Nuestro perro pertenece a una especie que tiene comportamientos y lenguaje propio, y a su vez cada raza tiene instintos propios relacionados con la función para la que fueron creados.
Por lo cual ser libre de expresar su propio comportamiento significa que debemos dejar que nuestro perro…. sea perro!!! Ya que uno de los problemas más habituales es que olvidamos que nuestro perro, miembro de nuestra famlia, compañero incondicional, no es humano.
Un perro debe poder libremente comportarse como tal, entre muchas cosas como especie canina esto implica que pueda olfatear cuando sale de paseo, que pueda acercarse a otro perro y relacionarse con normalidad, que pueda revolcarse en el césped, que camine en sus cuatro patas con normalidad, y que tal vez si es de su gusto se meta a una fuente de agua a nadar.
Nuestra raza particularmente el cocker spaniel americano, pero también todas las razas cuya función primaria es la caza, tienen una gran energía que hace a la función de recorrer los campos acompañando en las cacerías, así como una necesidad de buscar objetos para traérselos a sus dueños, ya que son condiciones necesarias para su función de cobrador de caza.
El cocker spaniel americano así como el inglés, son razas que en la caza cumplirían la función de cobrar la presa, esto significa buscarla y traerla sin daño a su dueño. Aunque nuestro perro sea el más mimado campeón del sillón, este instinto prevalece y él necesita canalizarlo porque sino se frustra.
Y con la frustración y el aburrimiento vienen los problemas de conducta. Por eso que nuestro perro sea libre de expresar su comportamiento natural, significa en nuestra raza por ejemplo el juego de atrapar y traer la pelota. Este simple juego canaliza el instinto de nuestro perro, lo ayuda a desgastar el exceso de energía, y crea un vinculo estrecho con su dueño que finalmente favorecerá la convivencia de todos.
También necesita canalizar su energía con caminatas y paseos, en los que debemos priorizar su seguridad más si vivimos en la ciudad, para proporcionarles cierto de grado de libertad podemos optar por correas extensibles o fijas de 5 metros de largo o más, de esta manera tendremos la seguridad del paseo con correa con un largo necesario para permitir movimientos más libre, dando la posibilidad de explorar el entorno.
Si proporcionamos el adiestramiento adecuado a nuestro perro de cachorro, y tenemos un ejemplar que obedece al llamado siempre y a la orden de detenerse, podemos en espacios abiertos y amplios, lejos de accesos a calles, soltarlos un momento. Siempre teniendo como prioridad su seguridad, y conociendo muy bien las reacciones de nuestro perro. Ante la duda lo mejor es no quitar la correa.
Espero que este articulo sea de ayuda, debajo pueden dejar sus comentarios y en ellos mismos consultarme si tienen dudas.