El camino como criadores comienza en distintos momentos de sus vidas.
Javier como estudiante de medicina veterinaria, amante de los animales por supuesto, ya avanzado en su carrera comienza en 1995 la cría de cocker spaniel ingles y cocker spaniel americano, conoce y se introduce de forma independiente en el mundo de las exposiciones caninas. Con el pasar de los años se recibe de medico veterinario en 1998, comenzando a ejercer en 1999 y sigue criando y logrando a través de los años varios títulos de campeonatos, razas, grupos y exposiciones ganadas con sus ejemplares.

Por otro lado Mariana, también estudiante de veterinaria, inicia su camino en la cinofilia de la mano de una raza diferente, el dogo argentino en 1999. Comienza a competir en exposiciones caninas y en 2001 con su primer cría da origen al afijo Albur Cano. Logra en los próximos años títulos de campeonato con sus perras, así como razas, grupos y exposiciones ganadas.

Para esa época se conocen en un grupo de criadores de la ciudad, compañeros amantes de esta hermosa actividad, que comienzan a viajar juntos a las exposiciones, a entrenar sus perros, a organizar actividades afines y a involucrarse cada vez en la cría y exposición de perros de raza.

En 2003 hacen el curso de Cinologia dictado por la FCA, que forma las bases para el correcto camino en la crianza, y paso inicial fundamental para, en un futuro, poder ser jueces de exposiciones caninas.

A partir de 2005 la amistad se convierte en algo más y Mariana y Javier se convierten en pareja y socios . Para esa época algunos eventos desafortunados hacen que los dogos argentinos dejen de ser parte de la vida de Mariana, así como los cocker de la vida de Javier. Y comienzan a criar la raza Schnauzer Gigante Negro que durante muchos años los llena de satisfacciones.

Para el año 2013 vuelven los cocker spaniel americanos a sus vidas para no volver a irse. Desde entonces han trabajado en la raza que se ha vuelto escasa en el país, ya que tuvo un gran auge en los años 80 y 90 para luego decaer.
En estos últimos años fueron completando distintas capacitaciones relacionadas con la crianza, el comportamiento y el bienestar animal, siempre en pos de dar lo mejor a sus perros y a los tutores que se llevan un cachorro de su hogar.

En 2019 incorporan genética nueva, de una línea de sangre europea. Cruzando una de sus hembras con un macho extranjero de uno de los criaderos de más renombre de Europa, Zilk's criadero sueco.

Finalizando 2023 con dos hijos de ese perro obteniendo títulos de campeonato, además de ejemplares de su línea genética anterior también obteniendo campeonatos.
Paralelamente sus perros han sido la base para que otros nuevos criadores comiencen sus propios afijos y sigan su propio camino.

Como broche de oro, el Club Argentino del Cocker Americano realiza el curso de raza que los habilitará a futuro a rendir el examen que los llevará a ser jueces especialistas de la raza.

Nuestra trayectoria nos marca un camino de superación, con objetivos claros en la preservación de esta bellísima raza y con la visión de mejorar camada a camada la calidad de nuestros ejemplares, no solo en su estructura, sino también en su salud y su temperamento.
Nuestra misión es darle a cada persona que se acerca a nosotros el mejor compañero de vida.